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Lámparas de Techo

Las lámparas de techo son imprescindibles en cualquier hogar y en cualquier estancia: habitaciones, cocinas, salones, recibidores… Es un elemento que aporta luz de manera general. Algunas personas piensan que no es necesario prestarle atención a este elemento decorativo (aunque también funcional), pero no debería pasar desapercibido cuando pensamos en redecorar nuestro espacio. En Gaalam, os ofrecemos distintas opciones e ideas, para que tengáis la oportunidad de descubrir vuestro estilo y elegir el diseño que más se adapte a él.  Hay que recordar que con estas lámparas, el punto de luz se sitúa en la zona superior y de ella cuelga un cable que la sujeta. Desde siempre han sido el tipo más utilizadas, ya que lo habitual a la hora de iluminar es hacerlo de arriba a abajo. 

Existen diversos lugares donde colocar las lámparas colgantes, aunque lo más habitual es ubicarlas en la mesa del comedor, en la cocina, en la zona de estar del salón o sobre la cama del dormitorio. Aunque este tipo de lámpara sea la más corriente, no significa que sea poco original: pueden ser muy vistosas y llamativas. Podemos crear distintas tendencias combinándolas, por ejemplo, con la colocación de varias lámparas colgantes de tamaños y modelos distintos o iguales. Hay algunos factores que habría que tener en cuenta, como el hecho de no colocarlas demasiado arriba, ya que crea un efecto de distanciamiento y no suele quedar bien, o el tener cuidado con los techos bajos, ya que tienden a quedar mejor en los altos.

También, que las lámparas simétricas deben colocarse al mismo nivel y no a diferentes alturas: da una sensación de inestabilidad y acaba por confundir nuestra interpretación del espacio. Por otra parte, a no ser que las bombillas sean decorativas, evita que se vean: su diseño no está hecho para decorar un ambiente.  

Otros factores a tener en cuenta, serían el color de las paredes. Esto ayuda a resaltar o a integrar la presencia de lámparas, en función del objetivo que se busque, por ejemplo: si el objetivo es definir el contorno blanco de algunos modelos, los tonos ideales serían los medios (grises, marrones o tostados).  

En algunos ambientes se podrían utilizar lámparas decorativas, sustituyendo los elementos decorativos clásicos. Cuando la mesa del comedor es amplia, es buena idea colocar varias lámparas que sean idénticas en línea: de esta manera todos los comensales quedarán correctamente iluminados. En un espacio ya decorado, es conveniente utilizar piezas sencillas y estudiar cómo va a derivar la luz de cada color. Los tonos anaranjados y amarillos por ejemplo, aportan calidez, mientras que los blancos proporcionan más luminosidad y un ambiente más frío.