Un sofá rinconera se diferencia por su forma en L y por estar compuesto por 2 partes. El elemento principal de este, suele ser un sofá de 2 o 3 plazas sin uno de los brazos para permitir crear el ángulo. El segundo elemento suele ser un asiento en el que poder recostarse, llamado chaiselongue. Este, se puede colocar en ambos lados del sofá.
Mirándolo desde otro lado, un sofá rinconera suele ser un gran elemento decorativo: es suficiente con encontrar el tapizado que combinen mejor con tu decoración y con tu estilo.
Los sofás rinconera de piel, suelen ser refinados y muy resistentes al paso del tiempo y a su uso en general. Los de tela son realmente fáciles de limpiar ya que suelen ser desenfundables: quítale la funda, lávela y vuélvela a poner ¡más fácil imposible! Este tipo de sofás ponen a tu disposición un elemento de calidad que aporta elegancia y tranquilidad, muchos incluyendo compartimientos especiales para guardar objetos (mantas, cojines, mandos…) .
Además, un sofá rinconera es una excelente opción para crear distintos escenarios en un mismo espacio, hace la función de separador de ambientes situándose en el centro o en el extremo de tu salón. La creación de tu rinconera puede realizarse de distintas formas, teniendo en cuenta las dimensiones y espacios muy reducidos. Puedes elegir qué tapizado deseas, color, textura, tamaño… así como el acabado.
Disponemos de sofás 3 plazas más modernos, clásicos, industriales… que combinadas con diversas telas y colores, proporcionan la máxima comodidad y confort en tu estancia. Si estás buscando sofás que aporten amplitud, comodidad y sofisticación en tu casa, has llegado al lugar perfecto. Un sofá de 2 plazas puede quedar pequeño, tanto para compartir momentos con él, como para el comedor (si es de grandes dimensiones).